Valber: proliferan deudas detrás del grupo que disputa el negocio alimenticio

A pesar de ganar licitaciones millonarias recientes, registra mora en aportes patronales y cheques rechazados. Salarios y aguinaldo impagos a empleados.


Grupo Valber SRL deudas

Fuente: Letrap

Fuente: letrap Fuente: letrap

El servicio alimentario en las diversas dependencias de la administración pública es un nicho de negocio cada vez más disputado a partir del volumen millonario de varias de sus licitaciones. En septiembre de 2004 ingresó como un jugador de mediana estatura en este variopinto espectro el Grupo Valber SRL, el cual fue comiendo territorio en los últimos tiempos a partir de hacerse de una serie de adjudicaciones en la esfera municipal, provincial y nacional.

No obstante, a pesar de ganar millonarias licitaciones recientes,  la firma atraviesa un sendero moroso cada vez más rojizo, no solo al exhibir deudas pendientes en cuanto a aportes patronales refiere, sino también por acumular un grueso stock de cheques rechazados. Todo esto, en un contexto de conflictos salariales en puerta, como sucede en el Hospital Cuenca Alta de Cañuelas, donde los empleados de la empresa que prestan servicio allí aún no percibieron su salario correspondiente a diciembre, como así tampoco su respectivo aguinaldo.

El horizonte asoma plomizo en un presente donde Valber figura, de acuerdo al Banco Central, en situación “irrecuperable” en lo relativo a compromisos con una entidad bancaria privada de renombre y “en problemas” con respecto a otra institución de ese calibre. Asimismo, registra un volumen de 470 cheques rechazados por alrededor de $33 millones.

En el grupo que tiene como CEO a Daniel Lopes Ritoenumeran entre su cartera de clientes a diversas dependencias, todas estatales: un fuerte anclaje en el Servicio Penitenciario Federal, algunas operaciones en centros de formación policial para efectivos de la Bonaerense y el servicio en algunos nosocomios de la provincia de Buenos Aires.

El posicionamiento de Valber en este último territorio se dio en tiempos de Cambiemos, más precisamente con el decreto 304 del 30 de junio de 2017 firmado por la entonces gobernadora María Eugenia Vidal. Allí, el Grupo Valber se hizo del abastecimiento de raciones al Hospital Descentralizado Zonal General de Agudos Dr. Abraham Piñeyro de Junín y del Hospital Descentralizado Zonal General de Agudos Dr. Mario Larrain de Berisso. Todo, por casi $50 millones.

Pero donde sí empezó a dar pelea Valber es en el Servicio Alimentario Escolar (SAE). Con base en Caseros, distrito de Tres de Febrero, este grupo se impuso en varias licitaciones, algunas relativas a la prestación del servicio en jardines municipales (por sumas que superaban los $16 millones) y otras más recientes y ya en tiempos de pandemia, como el abastecimiento de alimentos al Hospital de Campaña Municipal, por casi $2 millones.

El traspaso del manejo del SAE de la Provincia a los municipios en tiempos de vidalismo, también le abrió la puerta a Valber en distritos PRO, como lo era por ese entonces el Quilmes administrado por Martiniano Molina, que entregó una porción del abastecimiento de comedores quilmeños a este grupo, por más de $11 millones. Al poco tiempo, no dejaron de escucharse voces de malestar desde Suteba por deficiencias en la prestación de este servicio.

Amén del crecimiento que parecía exhibir Valber en los últimos años, un rojo moroso empezó a asomar al extremo de ya mantener deudas con trabajadores a cargo de abastecer de alimentos a un nosocomio de relevancia en medio de una pandemia.