Nueva obra dirigida por Lorena Vega se prepara para la primera función ¨online¨ de teatro

Lorena Vega, quien comenzó a dirigir bajo estricto protocolo "Civilización", pieza de Mariano Saba ganadora del concurso del Teatro Cervantes, y que se prepara para encabezar este viernes a las 21 la primera función online de la multipremiada "Yo, Encarnación Ezcurra", resaltó que si bien lentamente comenzó a reactivarse, "la pandemia expuso que la cultura es un sector muy informal que necesita ser revisado".


Vega teatro coronavirus

Fuente: Telam

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"Es todo por primera vez", reconoce la actriz que hasta hace poco encabezaba en distintos escenarios porteños "Yo, Encarnación Ezcurra", "La vida extraordinaria" y "Todo tendría sentido si no existiera la muerte" de Mariano Tenconi Blanco e "Imprenteros", biodrama sobre su familia que escribió, dirigió y actuó.

Pero ni el mundo ni los escenarios son los mismos que antes de la pandemia y en esta nueva, vertiginosa y cambiante normalidad, el teatro también intenta formas de reinventarse y sobrevivir.

Así es que este viernes a las 21 desde el Teatro El Picadero (entradas por Plateanet), Vega se pondrá en la piel de Encarnación Ezcurra en el unipersonal de Cristina Escofet dirigido por Andrés Bazzalo y con música en vivo bajo dirección de Agustín Flores Muñoz, que se alzó con el Premio ACE a Mejor Actriz en Unipersonal, entre otros.

Allí, la actriz interpreta a Encarnación Ezcurra, la mujer de Rosas, artífice en las sombras de la Revolución de los Restauradores y figura maltratada por la historia oficial, en los últimos momentos de su corta vida, recluida en sus habitaciones y obsesionada, por el amor intenso que la unió a Rosas y el poder perdido.

"Estuve repasando las letras, y en ese sentido es parecido a cuando ensayamos para hacer la función: trabajamos sobre la hipótesis del público, de un grupo de gente que nunca sabés cuál va a ser ni cómo va a ser porque siempre va a ir cambiando, pero acá lo curioso es que van a estar ahí pero no los voy a ver y van a estar en su propio espacio", detalló Vega.

Al respecto, reconoció que su gran incógnita es que "lo presencial tiene un diálogo, la obra se va nutriendo de las reacciones del público, de los momentos en los que se ríen, se genera estupor, hay algo que escuchar, los comentarios y eso también nutre otros tiempos".

"Después de haberla hecho tantos años, tantas veces, hay ciertos lugares que incluso ya los tenemos incorporados como momentos en los que el público aparecía reaccionando, entonces quizás eso puede llegar a ser parte. Lo cierto es que ahí van a estar mirando el equipo, el asistente, el director, la iluminadora, y me encontraré con el timing de ellos para percibir cómo tengo que ir yendo y seguir haciendo el camino".

Parte de ese camino también se está abriendo de la mano de "Civilización", pieza de Mariano Saba, ganadora del concurso federal "Nuestro Teatro" del Teatro Nacional Cervantes, que seleccionó 21 obras cortas no estrenadas de autores nacionales o residentes en el país, para llevarlas a cabo en soporte audiovisual y que Vega dirigirá.

"La obra habla de un incendio que se produce en el primer teatro argentino, La Ranchería, eso es real, hubo un incendio y es real que había viruela, una peste en ese momento", contó.

"En la obra -agregó- hay un trío de hermanas, una de ellas mestiza, de una relación extra matrimonial del padre, y las otras dos no la toleran por no ser legal y ser morena, y la llevan al teatro con la excusa de instruirla y lo prenden fuego para matarla".



Télam: ¿Cómo es la experiencia de congeniar la dirección con las pautas sanitarias?

Lorena Vega: Es complejo porque "Civilización" tenía en su escritura momentos donde algunos personajes tienen contacto físico o momentos donde, tipo Cenicienta, se tienen que probar un zapato. Primero pensamos trucarlo con la cámara, consiguiendo cinco zapatos iguales, hasta que descubrimos una manera de usar el mismo zapato sin tocarlo y lo hicimos así. Pero es todo un desafío, lo mismo que los momentos que tenían contacto físico: los tuvimos que cambiar por otro tipo de estrategia escénica que mantuviera la distancia.

T: ¿Hay teatro con protocolo?

LV: Estuvo siendo posible. Hay puestas y puestas, ésta es una donde la distancia es posible de incorporar porque está en clave de humor, tiene algo más de maqueta la obra, pero hay puestas que sí se podrían ensayar con protocolo pero necesitan en la escena otro tipo de cercanía, de códigos para relatar porque siempre es el encuentro de los cuerpos, con distancia o cercanía, se trata de la relación entre los cuerpos. En esta obra las relaciones de distancia son posibles para llevar el relato adelante

T: ¿Qué descubriste sobre el lugar de la cultura durante la pandemia?

LV: No queda duda que con la cuarentena hubo una necesidad de consumir y estar cerca de materiales artísticos: todos miraban obras por streaming, películas, series, ciclos. Pero además, por ejemplo, el regreso de "Atreverse" (Telefe) que está siendo un hit con absoluta identidad nacional, demostró que no sólo interesa el material extranjero de las plataformas on demand, sino que es un tema de fomento y distribución que la gente lo consuma. Por otro lado, la cultura es una parte recontra necesaria de una comunidad, fuente de trabajo de un montón de gente, un derecho para quienes lo ejercen, para quienes lo consumen y quedó expuesto que es un sector muy informal que necesita ser revisado, atendido, sostenido y reestructurado. La situación es de emergencia, hay una emergencia cultural y todos los colectivos y colectivas siguen pidiendo que se declare porque la perspectiva de recuperación de la actividad total es larga.