El sombrero, que cubría los ojos y gran parte del rostro de Melania, no solo capturó las miradas de los asistentes, sino que también provocó una situación inesperada. Cuando Trump ingresó al Capitolio en medio de una ovación y se acercó a su esposa para saludarla con un beso en la mejilla, se topó con el "ala dura" del accesorio, quedándose con el beso en el aire.

Los memes por el sombrero antibeso de Melania Trump

Elegancia que marcó la jornada

A pesar de la solemnidad del evento, Melania optó por un look que desentonó con la vestimenta sobria y las cabezas descubiertas de la mayoría de los invitados. Su decisión de mantener el sombrero intacto, incluso cuando estaba junto a su hijo Barron Trump, quien se destacó como el más alto entre los asistentes, reforzó su actitud firme y su estilo inquebrantable.