La Prefectura Naval ejercía una custodia domiciliaria sobre la casa del fallecido fiscal Alberto Nisman, sumada a la que éste habitualmente tenía, y en el marco de una causa por amenazas que recibía el entonces titular de la Unidad fiscal AMIA.

La querella en la causa por la muerte del fiscal Nisman, a cargo de la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado había acusado una suerte de "custodia paralela" con fines de espionaje sobre aquel.

Pero según información que recibió la fiscal de instrucción Viviana Fein, en realidad se trataba de un "custodio rotativo" de la Prefectura Naval asignado como custodia adicional del ex titular de la UFI AMIA.

Esa custodia había sido asignada por el juez federal Luis Rodríguez en el marco de una causa por presuntas "amenazas" contra Nisman y su ex, Arroyo Salgado. Eran amenazas de muerte que recibieron ambos vía mail en 2013 y 2014 y que nunca se determinó su origen.

En la causa por la muerte de Nisman, uno de los custodios de la Policía Federal que lo acompañaba habitualmente hizo referencia a un "espía" que hacía un seguimiento alrededor del domicilio del fiscal. Ahora se determinó que esa custodia en verdad era de Prefectura Naval, y que fue asignada en función de las amenazas que había recibido Nisman.